En la gastronomía de esta tierra tiene mucho peso la inusual diversidad de sus climas y ecosistemas que han dado lugar a las más variadas, delicadas y saludables materias primas: verduras, ajos, cebollas, patatas, setas, frutas, legumbres, corderos lechales, carnes rojas, caza mayor y menor, caracoles, miel natural, y todos los derivados de la matanza del cerdo, quesos frescos y curados de leche de oveja, y panes artesanales.